Hasta que se incorporaron los mecanismos con motores en las persianas en Valencia, los cierres de las ventanas contaban ya con una extensa e interesante historia. Con el paso del tiempo se han ido convirtiendo en una parte esencial de los hogares, tanto por sus elementos estéticos como por su funcionalidad. Permiten controlar la entrada de luz en cada estancia, regular con mayor precisión la temperatura y te proporcionan la privacidad que en muchas ocasiones necesitas.

Todo comenzó con la aparición de la contraventana, compuesta por dos puertas de madera que cubrían la ventana. Y desde ahí hemos evolucionado a los motores en las persianas en Valencia de hoy en día.

El origen de la persiana se encuentra en Persia, desde donde posteriormente se expandió al resto del mundo. Y el nombre proviene de la palabra francesa “persienne”, que significa “de Persia”.

En Europa se introdujo en el siglo XVIII, procedente de Persia como ya hemos comentado. Por aquel entonces, las persianas se componían de una estructura de listones que cubrían las ventanas, y se abrían y cerraban con unos cordeles.

Destacable fue también su entrada en Venecia al final de ese mismo siglo. Allí tuvieron su origen las famosas persianas venecianas, formadas por láminas horizontales de distintos materiales con una inclinación que dejaba entrar la luz natural. Un avance primordial fue el que realizó Edward Bevan con la sustitución del cordel por un cordón sin fin y una polea para optimizar su movilidad.

Ya en los siglos XIX y XX comenzaron a usarse nuevos materiales. El cristal, el metal o la fibra aportaron características innovadoras para la época.

Ahora que somos conocedores de la importancia de las persianas a lo largo de la historia del ser humano, no dudaremos en hacernos con las mejores persianas para nuestro hogar, y en Di-Mar Persianas y Toldos somos especialistas en el sector.